En plena emergencia sanitaria, hay consideraciones a tener en cuenta a la hora de identificar los síntomas propios de las infecciones respiratorias. Acá una guía.
Gleydiz Arboleda Amórtegui, docente del programa de Terapia Respiratoria de Areandina
El COVID-19 tiene manifestaciones clínicas que, al inicio de la enfermedad, pueden confundir tanto a cualquiera, incluso a especialistas médicos. Después de todo, se desarrolla tal cual como lo haría un resfriado común que gradualmente se va complicando.
De hecho, la fiebre, el dolor de cabeza, y el de garganta, son síntomas que comparten el COVID-19 y diferentes afecciones respiratorias como la gripe, la influenza e incluso una alergia.
Sin embargo, el COVID-19 presenta algunos signos más característicos como: una tos seca y regular; la pérdida del sentido del olfato y del gusto; el dolor o presión en el pecho; y la incapacidad para hablar o moverse.
Cabe mencionar que existen otros síntomas, aunque menos comunes, que se han encontrado en pacientes de COVID-19 a los que se debe estar atento:
Más allá de los síntomas, también se debe tener especial cuidado con aquellas personas que hayan viajado recientemente o que hayan entrado en contacto con portadores del virus.
Cuando una persona tiene dudas de si tiene o no el COVID-19, es importante consultar en las líneas de atención de la Secretaría de Salud del departamento o en la EPS adscrita. Después de todo, lo mejor es referirse a un profesional de la salud y buscar la manera de hacer una prueba diagnóstica para el COVID-19 que cada vez están más disponibles a través de laboratorios comerciales y hospitalarios además de los laboratorios de salud pública.